Los fitofármacos se basan en extractos de plantas (o de partes de estas) que presentan propiedades curativas. Se han usado durante siglos y pueden considerarse el origen de los tratamientos biológicos. Los fitofármacos siguen usándose en gran medida, sobre todo en países en desarrollo en los que no existe suficiente infraestructura para la medicina moderna, y están regulados en la UE tanto a nivel de la UE como a nivel nacional.
Preparados de herboristería
